Adicciones

Tratamiento de la cocaína29/09/2010

Pocas sustancias son tan adictivas, y pocas tan ligadas en su inicio al deseo de experimentar, asociado a ambientes lúdicos y con una sensación generalizada de inocuidad.

Cocaína

Cuanto antes mejor
La tendencia a aplazar el problema naciente con la cocaína es un grave ejemplo de cómo el cerebro evita segar de raíz el problema en un tiempo en que los cambios cerebrales y las modificaciones en la biografía del individuo no son todavía irreversibles. Conforme avanza el tiempo de consumo, el manantial de sensaciones se va secando y queda un desierto afectivo, una incapacidad para experimentar placer con actividades que antes lo producían. Y como en cualquier desierto, tanto más se adentre uno en él, tanto más camino hay que desandar, la mayoría de las veces sin ningún apoyo de los que sí existían mientras uno empezaba a perderse.
La cocaína convence a su usuario de que está a su servicio, pero al cabo del camino “su naturaleza” es convertir a su consumidor en su siervo. te convierte en su presa, sin estridencias, a través de sutiles cambios iniciales en su perfil de sueño, en su alimentación, en su disfrute, en la calidad y el tiempo dedicado a sus relaciones personales o familiares, incorporando ideas irrealistas-paranoicas. Te engaña al principio cuando descubre nuevas sensaciones en las relaciones intimas para acabar generando una insatisfacción permanente. Poco a poco va ocupando más espacio, requiere aumentos de dosis o que se asocien otras drogas para poder bajar sus efectos.
La cocaína se convierte así en el amante mórbido y desagradecido que vampiriza a su consumidor hasta arruinarlo personal, académica, laboral y socialmente.

Investigación del tratamiento para la cocaína
Actualmente la investigación en el tratamiento de la adicción a la cocaína ocupa a cientos de grupos en todo el mundo. Existen tratamientos prometedores como la vacunación, pero hasta que estos se hagan ciertos, es preciso establecer un abordaje basado en lo único que por el momento ha demostrado eficacia en el tratamiento de la adicción a la cocaína.
El balance de decisión, el trabajo sobre los pros y los contras de continuar con el hábito ya instituido es un primer paso muy útil para ganar terreno en un avance motivacional. Pero no debe olvidarse que por su gran poder adictivo, la cocaína afecta biológicamente y psicológicamente en tal medida al consumidor que hace necesario un abordaje global de todas las diferentes dificultades que pueden surgir en el intento de desintoxicarse ambulatoriamente.
Problemas de insomnio, depresión, ansiedad, impulsividad e incluso de pérdida de contacto con la realidad son habituales en los adictos a cocaína, tanto mientras consumen como en los períodos en que consiguen interrumpir el consumo por su cuenta.
El tratamiento dura dos meses en régimen de ingreso y después puede continuar en formato ambulatorio. Se enfoca en el control del craving, la impulsividad y las alteraciones de la personalidad. Proporcionamos la cobertura médica y hospitalaria bajo la que trabajar estos aspectos y otros muchos que determinan que la persona no sea capaz de romper con sus vínculos para la adicción.

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Somos un conjunto de profesionales preocupados por la salud física, emocional y espiritual de las personas.
Estamos encaminados a mejorar sus relaciones interpersonales y familiares, tomando en cuenta que
la adicción es una enfermedad que no distingue edad, clase social ni sexo.
Nuestro modelo de tratamiento,  con terapias individuales y grupales dentro de una «comunidad», nos ha dado la satisfacción de ver a nuestros pacientes reintegrarse como personas sanas a su círculo laboral, social y familiar.

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