Tratamiento de las pastillas29/09/2010
Los tranquilizantes son medicamentos que se prescriben para combatir estados de tensión, ansiedad y como apoyo para las alteraciones del sueño, como relajantes musculares, e incluso para el apoyo de en tratamientos para alcohol u otras drogas adictivas.
Muchos de nuestros pacientes acuden a nosotros después de llevar muchos años consumiendo pastillas recetadas en su día a día para aliviar estados de dolor crónico, fibromialgias, psoriasis, cefaleas, estados de estrés, alteraciones del sueño o ansiedad y otras dependencias. En algunos casos se prescriben derivados de la morfina y en muchos benzodiacepinas. Lo cierto es que al final el paciente desarrolla tolerancia que le obliga a incrementar las dosis y termina generando dependencia a estas sustancias.
La dependencia la encontramos cuando aparecen los síntomas siguientes:
- Falta de motivación o interés por actividades anteriormente gratificantes, sociales, familiares o personales.
- Aislamiento y reclusión cada vez más notable.
- Alteraciones emocionales ligadas a la desvinculación afectiva, apatía y desinterés por el estado de familiares y amigos y estados de irritabilidad y agresividad.
- Reducción de la coordinación motora, abandono personal y disminución de la realización de actividades en general.
- Ralentización de las funciones cognitivas, memoria, confusión y alteraciones en la toma de decisiones.
- Alteración del deseo sexual, incremento de ansiedad y de los ritmos de sueño.
- Personalidad dependiente y muy demandante.
- El consumo de estas sustancias genera rápidamente dependencia
Tratamiento
El primer aspecto a desarrollar es la aceptación de una adicción que el paciente no ha deseado ni buscado debido a que, en la mayoría de los casos, se apoyó de la prescripción médica para mantener la dependencia. El tratamiento requiere una fase de desintoxicación más larga que en otras adicciones. En muchos casos reaparecen síntomas que llevaron al consumo como ansiedad o insomnio.
Los pacientes son entrenados en la canalización adecuada de la ansiedad y en el control de la escalada de pensamiento que incrementa el craving. Estos factores son determinantes para el mantenimiento de la abstinencia y el desarrollo de una vida normalizada. Posiblemente este tratamiento sea el que más se beneficia de los servicios de control y reducción de ansiedad y del enfoque cognitivo del abordaje terapéutico.
Comentar: